BOTTI, ALFONSO
¿Por qué el papa Pío XI tardó 58 días en pronunciarse con respecto a la Guerra Civil española? ¿Por qué la Santa Sede no se implicó en las iniciativas de mediación para lograr la paz? ¿Qué papel jugaron la violencia contra el clero y la posición del Gobierno republicano en la actitud del Vaticano? ¿Hubo halcones y palomas entre los católicos españoles durante la Guerra Civil? ¿Pudieron los católicos evitar aquella guerra?
A lo largo de la Guerra Civil una minoría de españoles adoptó una actitud crítica con los dos bandos. A esta Tercera España pertenecieron algunos católicos que no compartían el catolicismo de cruzada de la inmensa mayoría de los obispos españoles. Círculos autorizados del catolicismo mundial apoyaron a esa Tercera España y se comprometieron para lograr una solución negociada del conflicto. Sus iniciativas obsesionaron a Franco y al cardenal Gomá ya que, aunque también denunciaron la persecución religiosa en el bando republicano, mostraban a la opinión pública mundial que la interpretación del conflicto español como " Cruzada " era falsa.
Desde Londres, uno de los principales protagonistas de estas campañas fue el sacerdote antifascista Luigi Sturzo, fundador del demócrata cristiano Partido Popular Italiano, a quien Mussolini, de acuerdo con el Vaticano, le obligó a partir al exilio. Nadie como Sturzo luchó por desvincular a la Iglesia católica del bando rebelde y negociar un armisticio que abriera las puertas a una paz de reconciliación. Sturzo, la Santa Sede, el cardenal Gomá y el pacifismo católico europeo son los protagonistas de este libro que, sobre la base de una vasta y novedosa documentación, supone un cambio interpretativo del conflicto. Un libro revelador sobre el papel de un sector del catolicismo que nunca quiso la guerra e hizo lo posible por conseguir una paz sin vencedores ni vencidos.