POLO, CRISTÓBAL
Paul Valéry se levantaba cada mañana entre las cinco y las
seis, encendía un cigarrillo y escribía sin interrupción en sus
cuadernos. Así lo hizo durante cuarenta y cinco años. «Estos
cuadernos son mi vicio», confesó alguna vez. También su
refugio: «una forma del deseo de estar conmigo, y hasta de
ser yo». Como él, muchos escritores, artistas y pensadores
han hecho de sus cuadernos un laboratorio, un espacio de
retiro o una forma de resistencia. El cuaderno como punto
de partida, como medio y como fin de la escritura; como soporte
de una obra siempre provisional, imperfecta y abierta.
Transitando entre el ensayo, la narración breve y el
aforismo, Cuadernística propone un viaje por esos pequeños
mundos en los que caben todas las formas de la imaginación
y el pensamiento: del tendedero lleno de notas de Ludwig
Höhl a los papeles cosidos a mano de Emily Dickinson, del
pincel ocioso de Yoshida Kenko¯ a la escritura microscópica
de Robert Walser, pasando por las listas de cosas de Sei
Sho¯nagon, el diario filmado de Jonas Mekas o las anotaciones
de Tove Jansson desde su isla diminuta. Este libro es una
crónica de esas escrituras en los márgenes y un homenaje
al cuaderno como forma de existencia.