GALÁN, EDUARDO
Calisto, un joven noble apuesto, entra en la huerta donde se halla Melibea, de quien queda profundamente enamorado. Ante el rechazo de esta y aconsejado por su criado Sempronio, decide encomendar su cuidado a Celestina para lograr por medio de ella el amor de Melibea.
Celestina es una mujer llena de fuerza y vida, seductora con la palabra, avara y hechicera
Versión de Eduardo Galán de esta tragicomedia que muestra lo más íntimo de las debilidades del ser humano, que finaliza con reflexiones morales y existencialistas a través de la mirada compungida de Pleberio, padre de Melibea.